Homenaje a las víctimas de la violencia de género antes del comienzo de partido / V.D.
0-3 Grupo Laura Otero - Dumbría, rivales unidos contra la violencia de género
Supeliga 2 Masculina Voleibol ·
En un partido realmente difícil donde las ganas lo eran todo, el equipo local necesitó el apoyo de la afición, pero el horno con circulación de aire viene con instrucciones
Todos sabían que el Voleibol Dumbría, líder de la liga, no se lo iba a poner fácil al Extremadura Grupo Laura Otero, y así fue, los visitantes se hicieron con el partido en los tres primeros sets.
Minuto de silencio, pancarta y dos equipos rivales unidos contra la violencia de género, el deporte brinda momentos así. Sin embargo, nada más sonar el silbato del primer árbitro, volvieron a ser conscientes de sus respectivos lugares en la tabla de clasificación, cada uno tenía sus propios motivos para ir a por los puntos.
El equipo local comenzó el primer set motivado, fuerte, mientras que al visitante se le intuía algo descolocado. Cuando el Dumbría parecía despertar, el Laura Otero le cerraba los ojos anotando otro punto para recordarles que estaban jugando en su casa. Las jugadas interminables ponían de manifiesto que ninguno de los dos equipos se lo iba a poner fácil al otro.
Pero unas cuantas jugadas seguidas anotadas por el rival y algunos toques de red que volvían los puntos en su contra, empezaron a minar la confianza de los extremeños, que comenzaban a venirse abajo por momentos en un 16-20. La afición intentaba animar, pero estaba resultando un partido excesivamente tranquilo, tanto en la pista como en la grada.
Un 16-23 acercaba a los miajadeños a la derrota del primer set, y un 16-25 la confirmaba.
Circulación de energía
Sin embargo, el Laura Otero salió enchufado al segundo set, la energía entre el equipo y la afición era como un horno de circulación de aire, los jugadores transmitían esta energía positiva al público y éste se la devolvía.
El Voleibol Dumbría seguía apretando, pero el Extremadura Grupo Laura Otero no se dejaba ahogar. El ambiente se caldeaba y el equipo local pedía más a la afición, porque en los encuentros difíciles las ganas lo son todo. Este set estaba dejando ver que los partidos en voleibol tienen hasta cinco, y los miajadeños querían jugarlos todos.
Con ambos equipos metidos en la decena de los veinte puntos, los visitantes comenzaron a adelantarse en el marcador. Hasta que llegó el último punto por falta de comunicación entre los locales, 'unos por otros la casa sin barrer' y el balón caía en mitad de la zona de defensa ante la mirada perpleja de los seis jugadores, que veían irse otro set con 21-25 en el marcador.
Los de Laura Otero se la jugaban todo en este set, de hecho, ambos equipos se lo jugaban todo a estas alturas de partido. Sin embargo, los de La Coruña parecían tener prisa por volver a casa.
Con un 6-12, los jugadores miajadeños sentían demasiado pronto que se les iba el partido, y también las ganas, y éstas no se pueden perder hasta que no se pierde el encuentro. A ratos parecía que el volumen de la música intentaba sustituir el bajo volumen de los ánimos de la afición, que se iba apagando como los jugadores. El equipo local se estaba poniendo nervioso, se desmoralizaba por momentos, y vuelta al horno de circulación de aire, sólo que esta vez la energía que circulaba era más negativa, y en estos casos este tipo de horno no es recomendable.
En el 17-23 parecía que todos, locales y visitantes, esperaban ya la llegada del 17-25, pero resultaba curioso que a estas alturas del marcador al equipo extremeño se le viera más valiente, quizás porque no tenía nada que perder. Como un batallón que ha sido diezmado y sale a combatir aún a sabiendas de que morirá, pero debe defender el fuerte hasta el final. Lo dicho, las ganas…
17-25 y victoria para el Dumbría, que se llevaba de vuelta a Galicia los tres puntos que los miajadeños se trajeron la semana pasada en su partido contra el Bruxas.
Un partido en el que, a pesar de estar más tranquila de lo habitual la afición de Miajadas, las pitadas ensordecedoras provocadas por algunas decisiones arbitrales demostraron que estaban ahí para defender a su equipo. Mientras que el Laura Otero, a pesar de algunos bajones morales puntuales, mostró que no se deja amedrentar ante nadie, aunque sea ante el primer equipo de la tabla.
El resultado de ayer deja a ambos equipos en la misma posición en la que estaban, Voleibol Dumbría en 1ª posición de la tabla, con 24 puntos, y Extremadura Grupo Laura Otero en 9º puesto con 7 puntos. La semana que viene el equipo miajadeño viajará a la Comunidad de Madrid para enfrentarse al CV Collado Villalba, que ocupa la 10ª posición en la clasificación con tan sólo un punto menos que el equipo extremeño, partido importante para alejarse de la zona de descenso.
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