Miajadas contará con un autocine al más puro estilo americano

El Ayuntamiento de Miajadas ha puesto en marcha la creación de un autocine de verano para que los vecinos puedan disfrutar de los estrenos de cartelera de forma segura.

Se establecerá en la zona del ferial junto a la Laguna del cuervo, ya que es un lugar amplio, donde se ubicará una gran pantalla y tendrá una capacidad de unos 150 coches, que sintonizarían el sonido de la película a través de la radio. Gloria Esteban, concejala de cultura, ha adelantado que el espacio ya se está adecentando y se están aplicando los cuidados medioambientales para hacerlo más óptimo.

La actividad del autocine se desarrollará entre el 25 de julio y el 16 de agosto, con la proyección de dos películas por fin de semana, sábado y domingo, en horario nocturno de 22:30 en adelante. La reserva de entradas, que serán gratuitas, se realizará de forma anticipada online.

Una de las alternativas de ocio que el Ayuntamiento de Miajadas se ha propuesto ofrecer a los vecinos para amenizar el verano y que la nueva normalidad no impida seguir disfrutando de una de las actividades que más aceptación tiene en la localidad. Pero insisten en que lo más importante es poder garantizar la seguridad siempre.

Esta forma de cine está muy extendida en Estados Unidos y llega con fuerza a España. Todos recordamos la clásica y cómica escena de la película 'Grease' en la que Danny le pide a Sandy que sea su novia formal mientras están en el autocine, por lo que la primera película para inaugurar el autocine miajadeño no podía ser otra.

El primer autocine de la historia, patentado por Richard M. Hollingshead, se inauguró el 6 de junio de 1933 en Camden (EE.UU.), con un cartel en letras gigantes que indicaba: 'Toda la familia es bienvenida, sin importar lo ruidosos que sean sus niños'. Tenía una capacidad para 400 vehículos y al estreno acudieron alrededor de 600 espectadores a los que se le cobraba 25 centavos por persona y 25 centavos por vehículo. Se vio como solución para muchas familias numerosas que no podían comprar las entradas para el cine y además como una atracción para las jóvenes parejas. La primera película que se proyectó, en la pantalla de 120 metros cuadrados, fue 'Wives Beware'.