El miajadeño Raúl Moro, en entredicho en Murcia por numerosas deudas empresariales

El empresario Raúl Moro desembarcó en la región murciana el pasado 15 de noviembre. Lo hizo para salvar al Real Murcia a través del atesoramiento del 11% de su accionariado y del desembolso de 400.000 euros. Justo un mes después de su aterrizaje en la región mediterránea, el diario La Opinión de Murcia publica hoy un reportaje titulado Raúl Moro, ¿un empresario de confianza?, en el que acusa al miajadeño de liderar «empresas sin actividad» y de estar «en paradero desconocido para no asumir sus deudas».

La periodista Ángela Moreno también detalla en la información la existencia de algunas «sentencias judiciales en contra por indemnizaciones sin abonar», de «créditos sin devolver a la administración pública» y de «una clínica dental que ha dejado sin tratamiento a decenas de usuarios» en Arcos de la Frontera (Cádiz).

Según el texto, «a lo largo de este año, el nuevo inversor grana ha recibido distintas notificaciones de juicios pendientes, aunque ni el extremeño ni sus abogados han aparecido por los tribunales». El reportaje también se centra en algunas empresas del empresario «sin domicilio social y sin actividad».

No solo los empleados y los clientes de sus empresas tienen problemas con él. De acuerdo con la información publicada por el periódico regional, «la Junta de Extremadura lleva bastante tiempo reclamando la devolución de una parte de la ayuda de 6.000 euros» que concedió a una de sus sociedades para contratar a dos personas.

Todas estas deudas de algunas de sus empresas han hecho desconfiar al entorno murcianista que está estudiando actualmente todo con sosiego para no ceder ante las peticiones del inversor extremeño de hacerse con el paquete empresarial al completo. Todo se resolverá en la junta de accionistas que tendrá lugar el próximo 28 de diciembre.