La residencia San Martín de Porres mantiene su sello de calidad por décimo año consecutivo

El pasado lunes la residencia de mayores San Martín de Porres superó una vez más la auditoría realizada por la empresa EQA y que le acredita con el sello de calidad que poseen desde el 2009.

Según señalan desde la propia residencia en una nota, «esta distinción supone el reconocimiento de algunos de los puntos fuertes de la organización como la profesionalidad del personal entrevistado y la gran implicación por parte de la dirección en el sistema de calidad». Asimismo, recalcan que «el logro de este sello de calidad es el resultado de un compromiso por la mejora continua en la que se implican todos los profesionales del centro». Desde hace 10 años poseen este sello, que además es revisado anualmente para «garantizar que todo funciona correctamente», subrayan desde San Martín de Porres.

De esta forma, las ventajas que otorga esta distinción son múltiples, entre ellas asegurar una buena organización para poder cumplir los objetivos; analizar el desempeño de forma integral y detectar oportunidades de mejora; una mejor organización del trabajo mejor y más eficaz con mejores resultados y permite que los mayores reciban los servicios oportunos de forma eficientes y con calidad.

También ofrece ventajas para los profesionales del centro según señala el centro. Por ejemplo, permite reducir el esfuerzo físico y mental de los trabajadores, mejora el clima organizacional, aumenta el grado de satisfacción en las actividades diarias y reduce las sobrecargas de trabajo.