La residencia de mayores San Martín de Porres ya cuenta con su propia biblioteca

La residencia de mayores San Martín de Porres de Miajadas ya cuenta con su propia biblioteca.

La iniciativa se dio a conocer el pasado 27 de octubre, con motivo del Día Internacional de las Bibliotecas, cuando pidieron la colaboración de aquellas personas que quisieran donar libros para conseguir realizar este proyecto.

El centro ha comunicado que la respuesta por parte de los vecinos, familia y demás donantes de libros está siendo estupenda, y ya han recibido numerosos ejemplares por parte de los familiares, de la asociación cultural Zaragata y de algunas instituciones como el Museo Iberoamericano de arte Contemporáneo de Badajoz, así como del poeta de Miajadas, Julio Santiago, que les ha hecho llegar su colección de poemas. Los residentes y trabajadores agradecen enormemente su generosidad, que les permitirá disfrutar del placer de la lectura.

Ya se han instalado las estanterías y esta misma mañana, coincidiendo con el Día de las librerías, los mayores han comenzado a seleccionar, clasificar y ordenar los libros, entre los que se encuentran novelas, libros ilustrados, de historia, de poesía, cuentos, clásicos de la literatura,… Ellos mismos han elegido el lugar para instalar la 'Biblioteca del Mayor', como la han llamado, ubicándola en la galería, donde da el sol por las mañanas y cuentan con cómodos sillones y mesas para disfrutar de la lectura.

Para inaugurarla, han elegido esta fecha tan señalada, 13 de noviembre, para hacer honor al hábito de la lectura y a las librerías, un lugar desde el que promover y enriquecer la cultura, como dijo Cervantes: «El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho».

Con la Biblioteca del Mayor quieren ofrecer un espacio de empoderamiento a los mayores, ya que ellos mismos la gestionan, y les acerca a la literatura: «Los libros nos dan alas y nos hace más libres. También queremos felicitar a las librerías de nuestro pueblo y animar a los miajadeños a visitarlas para elegir un buen libro que pueden regalar o regalarse».

En la residencia piensan que, en estos tiempos en que las circunstancias obligan a estar en casa, los libros alimentarán el espíritu de los mayores y llenarán sus ratos con los relatos, las historias y las ilustraciones, pues los libros son una cura para la soledad y se convierte en una agradable compañía. Y, como muestra de ello, citan a C.S. Lewis «Leemos para saber que no estamos solos»